🤔 Hey, qué tal. En esta entrega, reflexiono sobre los horizontes genéticos que afectarán a cómo seremos padres en el futuro: nos toca tomar decisiones colectivas… ¿e individuales?
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🧬 Tenemos que decidir
En 2018, el científico He Jiankui usó la edición genética para que las gemelas Lulu y Nana nacieran resistentes al virus del VIH que portaban sus padres. Él dice que lo logró1. Lo que es seguro es que consiguió tres cosas: poner en riesgo a las niñas, acabar en la cárcel y que yo me obsesionara con las decisiones al respecto que, como sociedad e individuos, tendremos que tomar. O tenemos que tomar.
En principio, la técnica de las tijeras CRISPR que usó Jiankiu ha quedado, de momento, proscrita para crear bebés modificados, y potencialmente superhumanos más altos, más fuertes o más listos. Modificar partes del genoma de los embriones es demasiado arriesgado, ya que sus consecuencias son muy difíciles de prever. Pero esto no quiere decir que podamos retrasar el debate.
La selección genética. Hace años que somos capaces de utilizar el cribado PGT para la fecundación in vitro, y así descartar enfermedades provocadas por un solo gen. Esto no es editar, sino seleccionar los embriones sin los genes que sabemos que provocan la fibrosis quística2 o la enfermedad de Huntington3, entre otras. Si eres de alto riesgo, en España te lo cubre la Seguridad Social.
El siguiente nivel ya está aquí desde 2020. Empresas como Genomic Prediction analizan los genes de los embriones de manera combinada (PGT-P) para tratar de estimar el riesgo de que durante su vida lleguen a desarrollar un sinfín de enfermedades: diabetes, hipertensión, esquizofrenia. Muchos expertos dudan todavía de la fiabilidad de estos tests, y por tanto no los recomiendan. Pero cabe pensar que se están acercando a ser efectivos. En principio, bien. ¿O no? ¿Y si te digo que también saben o sabrán qué nos hace de piel más clara, más altos o de mayor cociente intelectual?
Esto abre infinitas derivadas. Unos advierten de que llega la soñada eugenesia para las élites que pagarán por tener hijos perfectos (aumentando los niveles de desigualdad). Otros vaticinan una explosión de la esperanza de vida, si ponemos esta selección a disposición de todos. Pero hay quien advierte de que aumentarán los sesgos físicos: más gente blanca, por ejemplo.
¿Exageramos al plantearnos ya este debate? No lo creo. The Fertility Institutes te permite en un sencillo formulario elegir4 el color de los ojos de tu bebé y también el género5. Sus sedes están en Estados Unidos y México, donde esto es legal. La portada de su web enseña un muestrario de cinco bebés, todos varones. Y además de en inglés, en la página hay un enlace en chino donde se insiste en la detección de género. Sabemos desde hace años que las familias chinas prefieren hijos varones. Y conocemos el desequilibrio demográfico entre hombres y mujeres fruto de los casi 40 años de política de hijo único.
Lo que quiero expresar es que la posibilidad de elegir ya está aquí, va a aumentar y te la vas a encontrar. Ayer en la máquina de café, pregunté a mis compañeros quién querría elegir la altura o inteligencia de su hijo. A nadie le parecía buena idea. Replantee la pregunta: «Si te van a implantar 1 de 5 embriones y saben cuál va a ser más inteligente y con menos probabilidad de tener cáncer, ¿escogerías?» Cambiaron las respuestas.
A nivel global, hay muchos factores que favorecen la proliferación de niños a la carta. La fecundación in vitro supondrá pronto el 10 por ciento de los embarazos en muchos países. Entre muchos millonarios, el deseo por controlar la biología, o biohacking, es tendencia. Y sabemos que la legislación no será uniforme: si te lo puedes pagar, tendrás dónde hacerlo, como pasa con la gestación subrogada.
La doctora Jennifer Doudna, premio Nobel por su trabajo en edición genética, cuenta que se despertó por una pesadilla en la que Hitler le preguntaba más sobre su trabajo. Nos lo podemos tomar como un pintoresco aviso de las implicaciones del horizonte genético que se está abriendo. Construyamos debate para lidiar con ello como sociedad. Y como individuos, porque es cada vez más probable que pases por la fecundación in vitro, y que te hagan una pregunta para la que deberías prepararte.
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Feliz viernes,
Posdata: Le ha sentado mal.
China ha cerrado el acceso a información respecto a las gemelas y una tercera niña en la que se usó la misma técnica.
La fibrosis quística está causada por un solo gen defectuoso. Lleva al cuerpo a producir mucho líquido espeso y pegajoso, moco, ocasionando graves problemas pulmonares y digestivos.
La enfermedad de Huntington es hereditaria y está provocada por un gen defectuoso dominante (solo un alelo ya provocaría la enfermedad). Se trata de una enfemedad cerebral degenerativa que ocasiona problemas de movilidad y deterioro de la función mental.
No es totalmente fiable y depende de las posibilidades genéticas de los padres.
En España puedes escoger el género si es por motivos de salud. La prueba para identificar el género del embrión es sencilla y precisa desde hace décadas.
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